Montevideo ha experimentado cambios importantes en materia de movilidad como resultado de múltiples factores. Entre los más importantes, el crecimiento de la actividad económica del país, con un incremento de su PIB en forma constante entre los años 2003 y 2019, impactó en un fuerte incremento de la tasa de motorización, ampliando las posibilidades de disponer de vehículos motorizados por parte de los hogares y generando una creciente necesidad de circulación de bienes y servicios. Con un espacio vial de circulación limitada y con un crecimiento lento de su infraestructura, la ciudad enfrenta un desafío importante para no permitir que ese desfase genere inconvenientes tanto en la movilidad de las personas y sus necesidades de accesibilidad como en la actividad económica y productiva. Estos cambios han hecho necesario que la Intendencia abordara la problemática en forma innovadora. La creación del Centro de Gestión de Movilidad apunta a resolver este desafío. Se trata de un proyecto de gestión público privado que incorpora innovaciones tecnológicas con manejo de grandes cantidades de información para hacer frente a múltiples variantes y alternativas que se presentan en la movilidad de la ciudad. El CGM se planteó como objetivo mejorar la calidad de vida de quienes transitan por la ciudad a partir de la gestión eficiente de Sistemas Inteligentes de Transporte (ITS), buscando implantar una gestión moderna de la administración y el control del tránsito, actuando en tiempo real, mejorando la eficiencia circulatoria, la seguridad vial y la calidad ambiental. Para ello, se incorporaron herramientas tecnológicas compuesta por controladores de semáforos centralizados, sensores para conteos de tránsito, sensores inalámbricos para evaluación de demoras, cámaras de monitoreo, paneles de mensajería variable y equipos de fiscalización electrónica, cuyas funciones son contar con información en tiempo real sobre el flujo y el estado del tránsito en la ciudad.